Una pausa sagrada en medio del corre-corre navideño

December 10th, 2025

Família de Mar Azul,

Estamos oficialmente a 15 días de Navidad, ese punto exacto donde algunos ya tienen todos los regalos comprados (ni hija Sophia) y otros acaban de empezar medio tarde con una fe profunda (yo) y un carrito de compras vacío. Si estás en ese segundo grupo… que la gracia te acompañe. Pero te recuerdo que la primera Navidad no fue celebrada con abundancia, sino con sencillez. Los pastores fueron a ver a Jesús sin riquezas, sin ofrendas costosas, sin nada que impresionar… solo llevaron su asombro, su obediencia y su corazón. Y eso fue más que suficiente. Si hoy sientes que no tienes mucho para dar, descansa en esto: tu presencia, tu fe y tu gratitud también son un regalo que agrada profundamente a Dios.

Preparando nuestros corazones para el Periodo de Descanso

La semana pasada compartimos que como iglesia pronto entraremos en un Período de Descanso intencional. Por eso en esta carta nos les hablaré nada sobre la soga o correr amarrados. Solo les mostrare una de mis fotos favoritas de Gino liderando una soga en el 5K de Juncos porque vuelvo y repito no es lo rápido que hagas algo es la actitud con la que lo haces lo que importa.

Este Periodo de Descanso no es una pausa por cansancio, es una pausa por dependencia. No es desconectarnos de Dios, es exactamente lo contrario: es hacer espacio para escucharlo mejor. Es un tiempo para bajar el ritmo, agradecer lo vivido, soltar la carga acumulada del año, y volver a alinear nuestro corazón con lo que Dios desea hacer en nosotros y a través de nosotros el próximo año.

El domingo pasado fuimos recordados de algo profundamente esperanzador: sí es posible caminar con Dios aun en medio de esta temporada tan intensa. La quietud no es una técnica de autoayuda, no es un escape de la realidad, tampoco es aislamiento. La quietud del Evangelio es ese momento santo donde dejamos de hacer, de producir, de controlar… para poder ser delante de Dios. Para experimentar Su carácter, Su gozo y Su paz

“Quédense quietos, y reconozcan que yo soy Dios” (Salmos 46:10).

Es con Jesús con quien vamos a encontrarnos en ese descanso.

Jesús mismo, en medio de multitudes, demandas y milagros, se retiraba a lugares solitarios para orar. Si el Hijo de Dios necesitaba esa pausa intencional, ¡cuánto más nosotros! Y esta temporada nos vuelve a confrontar con aquella escena tan humana de Marta y María. Marta, afanada, cargada, tratando de hacerlo todo bien. María, sentada a los pies de Jesús, eligiendo la mejor parte. No fue aprobada por su desempeño, sino por su decisión de priorizar la presencia de Dios por encima de la actividad.

Jesús nos sigue haciéndonos la misma invitación hoy: “¿Estás cansado? ¿Agotado? Ven conmigo… y yo te mostraré cómo tomar un verdadero descanso” (Mateo 11:28–30, The Message).

Spoiler: “La Generosidad en Mar Azul No Cierra por el periodo de Descanso”

Algunos líderes de otras iglesias cuando escuchan de nuestro periodo de descanso curiosamente me dicen: “Jonathan, no te preocupa la generosidad, no se va a afectar durante dos domingos”. Yo siempre sonrío al escuchar eso, porque sé que lo dicen con un buen corazón. Pero mi respuesta es que en Mar Azul la generosidad en las personas (como tu) nace desde una convicción bien profunda: los discípulos de Jesús no somos generosos solo cuando alguien nos lo recuerda desde la plataforma. Somos generosos porque el Espíritu ha sembrado en nosotros un corazón dispuesto a sostener la obra de Dios, aun cuando no estamos reunidos físicamente, aun cuando no hay un recordatorio, aun cuando no hay un momento “oficial”. Aunque durante este periodo no nos reunimos físicamente hemos visto a Dios suplir a través de los discípulos fieles…y este año no será la diferencia.

Dulce Navidad

Queremos volver a invitarte a nuestra gran celebración comunitaria Dulce Navidad, una mañana donde nuestra comunidad se reúne para celebrar el nacimiento de Jesús de una manera hermosa, creativa y profundamente significativa. Nuestros niños de Mar Azul Kids nos compartirán el mensaje del Evangelio a través del arte, la música y la ternura de sus corazones. No es solo un evento —es una experiencia para toda la familia. ¡Invita a alguien y celebremos juntos al Rey que vino a traernos verdadera paz!

Que esta Navidad no sea solo una temporada de actividad, sino una temporada de presencia.

Con amor
Pastor John

P.D.

Esta carta es posible gracias al apoyo de nuestro auspiciador Heavenly Hands, masajes terapéuticos. Hector te deja renovado y listo para seguir adelante en tu carrera de vida. Contáctalo por Instagram o por texto al (787) 513-6665 (a domicilio) y (939) 231-4686 (en cabina).